Los Trastornos de Personalidad representan una patología emergente en el campo de la Salud Mental. Se estima que entre el 1 y 2% de la población general padece un Trastorno Límite de la Personalidad (TLP). Las dificultades que conlleva su tratamiento suponen un importante reto terapéutico.
Sin embargo, hay técnicas psicoterapéuticas específicas que cuentan con evidencia científica de eficacia en el tratamiento de estos pacientes. Entre ellas, la Psicoterapia Focalizada en la Transferencia (TFP) es la que posibilita una modificación en mayor profundidad de la personalidad.
Se trata de una psicoterapia de orientación psicoanalítica, desarrollada por el Profesor Otto Kernberg que parte de la teoría de las relaciones objetales. Tiene como objetivo fundamental una mayor integración de la identidad del paciente y una mejora significativa de la funcionalidad en los diferentes ámbitos de la vida, tanto afectivo-relacional como social y laboral.